Los vinos son muy vulnerables a los rayos ultravioleta de la luz natural y artificial que producen cambios sobre todo en su sabor y color. Ejemplo son los espumantes, solo un par de horas de exposición en forma directa a una dicroica o a la luz del sol, pueden dañarlos y transformarlos en una bebida distinta. Ni hablar de las botellas exhibidas en vidrieras o góndolas, con poca rotación. Afortunadamente los tintos, por lo general, son menos vulnerables al estar protegidos por sus componentes fenólicos.
Esta alteración en la composición química de los vinos, producida por exceso de luz, se conoce como “sabor a luz” o como dicen los franceses “goût de lumière”. Se percibe como un olor característico parecido al cartón mojado o goma tostada.
Por esto, a la hora de elegir el lugar para comprar tus botellas de vino, sobre todo de alta gama o de guarda, es importante seleccionar proveedores que contemplen no solo la estética del local sino también la iluminación correcta para una conservación adecuada.
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Utilización de tiras de led flexible, 60 led por metro, 14,4w por metro. Blanco Cálido. Sin rayos UV.
Aunque la mejor aliada de los vinos es la penumbra, actualmente existe tecnología que permite iluminar y ambientar sin producir alteraciones en el vino, si se aplica correctamente. Hablamos de los LED (Diodo Emisor de Luz), que no poseen filamentos como los focos comunes y están elaborados con compuestos que se excitan con la electricidad produciendo luz.
Estos diodos no producen luz ultravioleta y su temperatura de trabajo es muy inferior a la de los demás tipos de lámparas, con lo cual son ideales para iluminar cavas, estivas, depósitos y exhibidores de vinos y espumantes. Si podemos lograr los mismos niveles de iluminación, ¿para qué seguir utilizando lámparas que consumen mucho, se queman rápido, emiten luz ultravioleta y generan mucho calor? Quizás por desconocimiento o, por presupuesto.
Sin embargo en bares, restaurantes e incluso bodegas que, además de conservar vinos, deben mantener encendidas las luces de sus salones o exhibidores más de 10 horas diarias, el ahorro energético será suficiente justificativo para la utilización de tecnología LED, por que los mismos consumen 10 veces menos y al cavo de 8 meses probablemente se haya amortizado la inversión pagando menos consumo de luz y mantenimiento.
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